Hay diferentes variedades de cerezos, cada una con flores de diferentes tipos, colores, cuidados y tamaños. Entre las más frecuentes se encuentran:
Somei Yoshiko: una de las variedades más apreciadas, delicadas y cultivadas por sus pétalos blanquecinos de toques rosados.
Shidarezakura: variedad con ramas con preciosas y fuertes flores rosas que caen sobre el suelo.
Yamazakura: variedad que crece por todo el país, sus hojas nuevas crecen al mismo tiempo que florecen, generando un impacto total en todo el árbol.
La vida de la flor del cerezo es bastante corta ya que suele durar sólo un par de semanas. Durante la primera semana, los cerezos van floreciendo hasta llegar a su esplendor. Unos días más tarde, las hojas caen de los árboles, dando por finalizado el hanami. Por lo cual, la visita es efímera pero realmente inolvidable.